Diez años han pasado desde una de las noches más recordadas —y polémicas— del fútbol chileno. Durante la Copa América 2015, Arturo Vidal protagonizó un accidente automovilístico mientras conducía su Ferrari en estado de ebriedad. Lejos de ser marginado de la selección, el mediocampista continuó jugando el torneo y fue figura en la histórica consagración de la Roja. Hoy, una década después, nuevos detalles sobre aquel episodio vuelven a salir a la luz.
En conversación con el podcast Campeones, no finalistas, el suboficial de Carabineros Osvaldo Pezoa, quien detuvo a Vidal esa noche, relató cómo se desarrolló el tenso momento. Según su testimonio, el futbolista reaccionó con prepotencia e incluso lo agredió físicamente "Arturo Vidal se ofusca, se enoja y hay una persona... bueno, había varias personas ahí que grabaron dicha situación y él incluso me lanza un golpe".
A pesar del escándalo y la condena pública que generó el hecho, el entonces técnico Jorge Sampaoli decidió no sancionar al jugador. La decisión fue duramente cuestionada en su momento, pero terminó validándose con la histórica obtención del título continental.